ORACIÓN PARA PEDIR POR LOS FRUTOS DEL PROCESO
DE REVISIÓN DE LOS ESTATUTOS DEL REGNUM CHRISTI
Jesucristo, reunidos en tu nombre como familia espiritual, nos
ponemos en tu presencia.
Tú te has dignado revelarnos el misterio del amor que arde en
tu Corazón por todos los hombres y tu deseo de reinar en
nuestras almas y en la sociedad.
tu Corazón por todos los hombres y tu deseo de reinar en
nuestras almas y en la sociedad.
Nos sentimos llamados a conocer más y mejor el don del
Regnum Christi, para que sea fecundo en nuestras vidas y
contribuya a la formación de numerosos hombres y mujeres
convencidos de tu amor y comprometidos con sus talentos en
el apostolado.
Regnum Christi, para que sea fecundo en nuestras vidas y
contribuya a la formación de numerosos hombres y mujeres
convencidos de tu amor y comprometidos con sus talentos en
el apostolado.
Te pedimos que envíes tu Espíritu:
que sea luz para comprender con la mente y el corazón
nuestra identidad, espíritu y misión;
que sea fuerza renovadora para que, atentos a los signos de
los tiempos, estemos siempre prontos a dar una respuesta a las
necesidades de la Iglesia y del mundo;
que sea fuego abrasador en nuestros corazones
de apóstoles de tu Reino;
que nos llene de sus dones para secundar
tu plan sobre nosotros.
que sea luz para comprender con la mente y el corazón
nuestra identidad, espíritu y misión;
que sea fuerza renovadora para que, atentos a los signos de
los tiempos, estemos siempre prontos a dar una respuesta a las
necesidades de la Iglesia y del mundo;
que sea fuego abrasador en nuestros corazones
de apóstoles de tu Reino;
que nos llene de sus dones para secundar
tu plan sobre nosotros.
A ejemplo de María queremos vivir esta etapa de nuestro
camino descubriendo y acogiendo la acción de tu Espíritu,
aceptando tu designio con fe, “dando vueltas en el corazón” a
tu querer, cantando tu alabanza por las grandes obras que has
hecho y sigues haciendo entre nosotros.
camino descubriendo y acogiendo la acción de tu Espíritu,
aceptando tu designio con fe, “dando vueltas en el corazón” a
tu querer, cantando tu alabanza por las grandes obras que has
hecho y sigues haciendo entre nosotros.
Jesucristo, Tú eres el centro de nuestras vidas. Con un amor
renovado, hoy te decimos:
“Cristo Rey nuestro, ¡Venga tu Reino!”
renovado, hoy te decimos:
“Cristo Rey nuestro, ¡Venga tu Reino!”
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