María ha explicado a LomásRC que “como simpatizante del Regnum Christi y soltera es extraño que yo participe en la organización de una actividad como esta... pero cuando Juan Ramón me propuso ayudarle, me llamó la atención. Primero porque era una actividad de andar. Y, segundo, porque me parece una idea bonita: pasar un día en el campo en un ambiente distendido en el que participan sacerdotes, consagradas y familias, algunas del Regnum Christi y otras no. Cada día me gusta más y siento que es necesario que los niños y jóvenes tengan esta vivencia”.
Monica, que no es la primera vez que participa con su marido y sus dos hijos, explica que “pasamos un día maravilloso. Esta vez, al ser poca gente, ha sido más íntimo, más agradable la convivencia, nos ayudamos los unos a los otros porque el terreno era algo complicado en las subidas y bajadas”. Y continúa: “La misa fue espectacular, y ese rosario sentados en la hierba, bajo la encina con la paz que transmitía el lugar, los niños sentados alrededor y qué decir de la charla que nos dieron los sacerdotes”. Y concluye: “A la vuelta comentaba con mi marido, que bien nos había venido pues llevamos una época de mucho estrés y estos ratitos de paz y espiritualidad nos había ayudado mucho”.
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