A través de Altius, la historia de Javier ha ido dando la vuelta. Desde esta obra social del Regnum Christi se puso en marcha un programa para acompañarle en la búsqueda de un empleo y auxiliarle para cubrir las necesidades básicas de alimentación en su hogar.
Javier valora, de todo este camino, la importancia de la atención psicológica en situaciones como la que él atravesaba. De la mano de su orientadora, también pudo fortalecer su motivación y autoestima a través de los talleres que se imparten en Altius para seguir adelante hacia un empleo que mejorase sus circunstancias.
“Llegué a la Fundación Altius muy mal anímicamente, por mi edad me rechazaban en muchas selecciones y eso te hace polvo el ánimo.Desde el primer momento me atendió una coordinadora que ha estado conmigo todo este tiempo, casi doce meses. Eso ha sido fundamental, me ha apoyado mucho, me ha animado a ir a ofertas de trabajo, me marcaba los pasos que tengo que seguir y eso te ayuda a que no pares".
Con ese objetivo -volver al mercado laboral-, Javier hizo un curso de Comercio y Atención al cliente para enriquecer su currículum y que le especializase. De esa formación destaca, además de lo aprendido, a las personas con las que lo ha vivido, incluido su profesor: “El profesor nos motivaba mucho y entablas una amistad con personas que están en tu misma situación y sabes que puedes contar con ellos. Tienes la sensación de ayuda de gente que no conoces."
Gracias a sus prácticas en Bricomart, incluidas en el programa, la empresa conoció a Javier y quedó encantada con su trabajo. Hoy, está contratado en un sector que, además, le gusta y le permite estar en contacto directo con las personas. Por todo ello, agradece a la Fundación por la ayuda que le ha prestado, tanto a él como a su familia, y también por la que ofrece a personas en su misma coyuntura.
Javier valora, de todo este camino, la importancia de la atención psicológica en situaciones como la que él atravesaba. De la mano de su orientadora, también pudo fortalecer su motivación y autoestima a través de los talleres que se imparten en Altius para seguir adelante hacia un empleo que mejorase sus circunstancias.
“Llegué a la Fundación Altius muy mal anímicamente, por mi edad me rechazaban en muchas selecciones y eso te hace polvo el ánimo.Desde el primer momento me atendió una coordinadora que ha estado conmigo todo este tiempo, casi doce meses. Eso ha sido fundamental, me ha apoyado mucho, me ha animado a ir a ofertas de trabajo, me marcaba los pasos que tengo que seguir y eso te ayuda a que no pares".
Con ese objetivo -volver al mercado laboral-, Javier hizo un curso de Comercio y Atención al cliente para enriquecer su currículum y que le especializase. De esa formación destaca, además de lo aprendido, a las personas con las que lo ha vivido, incluido su profesor: “El profesor nos motivaba mucho y entablas una amistad con personas que están en tu misma situación y sabes que puedes contar con ellos. Tienes la sensación de ayuda de gente que no conoces."
Gracias a sus prácticas en Bricomart, incluidas en el programa, la empresa conoció a Javier y quedó encantada con su trabajo. Hoy, está contratado en un sector que, además, le gusta y le permite estar en contacto directo con las personas. Por todo ello, agradece a la Fundación por la ayuda que le ha prestado, tanto a él como a su familia, y también por la que ofrece a personas en su misma coyuntura.
Una historia incrible, mucho ánimo!!!
ResponderEliminarMucho ánimo Javier! haces un gran trabajo....
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