Pedro Trevijano, Galardón Alter Christus 2016 de Pastoral familiar: “Me preocupa la descristianización de los adolescentes, no reciben los valores cristianos para comprender el sentido de la vida”

Don Pedro Trevijano es un logroñés que ha dedicado sus más de 50 años de vida sacerdotal a la familia y a los adolescentes, razón por la cual la Fundación Alter Christus le ha entregado el Galardón de pastoral familiar. Actualmente, además de trabajar en una residencia para enfermos de Alzheimer, escribe en un blog sobre temas familiares y es el consiliario del Movimiento Familiar Cristiano en Logroño. A continuación ofrecemos una entrevista que ha concedido a LomásRC.

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¿Qué le dice a un “pastor y profesor”, como usted suele definirse, un galardón por su trabajo en pastoral familiar?

A nadie le amarga un dulce, y que le premien a uno siempre es de agradecer, aun reconociendo que estoy convencido que hay muchísimos sacerdotes con más méritos que yo a la hora de ganar este premio.

El sacerdote que trabaja en pastoral familiar siembra siempre para el largo plazo. ¿Qué le queda en el corazón de un sacerdote en el día a día, en este trabajo con las familias?

La base del Cristianismo son dos palabras: Cristo y Amor. He procurado querer profundamente a mis alumnos tanto del Seminario, donde enseñaba Moral Fundamental, Moral Sexual y el Sacramento de la Penitencia, como del Instituto donde enseñaba Religión y Moral Católica a adolescentes y jóvenes. Consecuencia de ello han sido mis libros “Orientación cristiana de la Sexualidad” y “Pensar a los quince”, dirigido a los adolescentes pero también a sus padres. Soy también Consiliario del Movimiento Familiar Cristiano, donde se trabaja con matrimonios.

Usted ha enseñado el Sacramento de la Penitencia en su seminario. ¿Cree Usted en él?

Don Pedro recibiendo el galardón de manos
de Asunta Serrano

El Sacramento de la Penitencia es uno de los siete sacramentos. Por tanto existirá mientras exista la Iglesia. Lo que es indudable es que está en crisis, lo que en buena parte se debe a que los fieles no se confiesan porque es difícil encontrar un cura para confesarse y los curas no nos sentamos porque los fieles no vienen. Es un círculo vicioso que hay que romper principalmente por parte de los curas. Cuando la gente sabe que hay confesores, poco a poco vuelven al Sacramento.

Usted ha trabajado buena parte de su vida con adolescentes. ¿Qué es lo que más le preocupa de ellos?

Su descristianización, de la que no son culpables. Por una parte hay cantidad de familias en las que no se reza nada, y de ahí un chico no recibe los valores cristianos que le son necesarios para comprender cuál es el sentido de la vida y por qué está en este mundo. Por otra parte están nuestras autoridades, que con su sumisión a lo políticamente correcto, intentan seudoeducar, o hablando más claro corromper, a nuestros niños, adolescentes y jóvenes con la ideología de género, lo que es simplemente el camino del Mal, según nos ha dicho muchas veces el Magisterio de la Iglesia, y muy especialmente el Papa Francisco.

¿Ha hecho Usted algo contra la ideología de género?

Sí, he escrito un libro titulado “Relativismo e ideología de género”, en el que ataco estos dos cánceres del pensamiento actual.

En la Iglesia hay un verdadero interés por la familia. Ahí está el sínodo celebrado en años anteriores y la exhortación del Papa Francisco Amoris Laetitia. ¿Qué aporta el documento pontificio a su trabajo con las familias?

Muchos grupos cristianos vamos a dedicar nuestras reuniones de este año a estudiar la “Amoris Laetitia”. En la Iglesia hay cantidad de documentos del Papa y de los Obispos que pueden ayudar a nuestras familias a vivir cristianamente el amor. Nuestros Obispos publicaron hace pocos años, uno, titulado “La verdad del amor humano”, que es una verdadera joya. El problema es que la gente no los lee y ni siquiera los conoce.

Foto de familia, con don Pedro
en el centro de la imagen

Padre, el futuro de la sociedad se cuaja en la familia, pero es que parece que hoy en día ya no se sabe lo que es la familia… ¿Hay algún mensaje de esperanza

Aparentemente el panorama es desesperanzador. Pero también hay y cada vez más brotes verdes de esperanza. Y sobre todo recordemos que, como decía san Juan XXIII, el verdadero Jefe de la Iglesia no es el Papa, sino el Espíritu Santo y en sus manos estamos.

¿Qué mensaje quisiera enviar a otros sacerdotes que estén trabajando en pastoral familiar?

Un mensaje de fe y de esperanza. Como nos ha dicho Jesucristo: “Tú eres Pedro y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia y el poder del infierno no la derrotará “(Mt 16, 18) y “Sabed que yo estoy con vosotros todos los días hasta el final de los tiempos” (Mt 28, 20).