5 de mayo de 2016

Fotogalería | Chicos y chicas del ECYD de todo el mundo se encuentran en Roma para participar en el Jubileo de los adolescentes con el Papa

Chicos y chicas del ECYD provenientes de Barcelona, Madrid, Sevilla, Houston, Milán, Bolzano, Padua, Verona, Roma y Santiago de Chile, se dieron cita en Roma los días 23 y 24 de abril para participar en el Jubileo de los Adolescentes. Participaron en el Encuentro con el Papa Francisco en la Plaza de San Pedro, pero también hubo encuentros propios para ellos en el Ateneo Pontificio Regina Apostolorum.


El sábado 23 se realizó una caminata por la Vía de la Conciliación desde Castel Sant’Angelo hasta la Puerta Santa en la Basílica de San Pedro. En la Plaza de San Pedro varios sacerdotes estuvieron confesando, entre ellos algunos legionarios de Cristo. Como ya contamos la semana pasada, el papa Francisco salió sorprendió una vez a todos poniéndose a confesar a los adolescentes que acudieron al encuentro. Dos alumnas del colegio Everest de Madrid tuvieron la oportunidad de confesarse con él. Además, un chico y dos chicas del ECYD de Chile tuvieron la oportunidad de saludar al Santo Padre. Le regalaron al Papa una camiseta y una cruz del ECYD, explicándole de qué se trataba.

La tarde del domingo 24 de abril, los grupos del ECYD se reunieron en al Ateneo Pontificio Regina Apostolorum para tener un encuentro con el P. Eduardo Robles-Gil, L.C., y compartir un momento de convivencia e integración. Dos de ellos iniciaron la sesión compartiendo su testimonio sobre su experiencia ECYD. Al hablar de su experiencia, Angélica Portales, del colegio Everest de Chile, decía que la misión de éste es "encontrarse con Jesús, pero de otra manera, no sólo con misas y oraciones, sino en la vida real". Lo que más le gusta en el ECYD es el encuentro con sus amigas y las actividades apostólicas que hacen juntas: "Las responsables comparten a Jesús con nosotras y nosotras lo compartimos con los demás".

Durante su intervención, el  P. Eduardo les recordó algunas ideas fundamentales de la homilía del Santo Padre, respondió a algunas preguntas y les saludó personalmente. Después de este encuentro, los asistentes tuvieron un momento de convivencia, con juegos, música y mucha pizza. Una broche de oro para una jornada inolvidable. A continuación puedes ver más fotografías.



















    
  
     


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