Don Juan Fran, párroco de Utrillas: Familia Misionera “me aporta alegría, encuentro con Cristo, comunión entre padres e hijos, y fe en Dios”

Don Juan Fran Soler es un sacerdote de la diócesis de Teruel Albarracín. Tiene cerca de 50 años, pero mucha experiencia y trabajo a sus espaldas. Hace ya 13 que conoció Familia Misionera de Barcelona, y desde entonces le invita cada año a apoyarle en la atención pastoral en estos días de Semana Santa. Es párroco de Utrillas, Las Parras de Martín, La Hoz de la Vieja, Maicas y Plou. Unas poblaciones compuestas mayoritariamente por personas mayores, muchos jubilados de las minas de carbón. Pero nos cuenta este párroco aragonés que su vida es oración, Eucaristía, acompañar y escuchar a la comunidad… y que “lo importante para llegar a todo o casi todo es la organización”. Ahí es en donde durante los cuatro días más importantes del año, Familia puede apoyarle. Lee a continuación la entrevista que ha concedido a LomásRC.

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El lema de las misiones de Familia Misionera de este año es “Enciende la luz de Jesús”, si hablamos de Utrillas, ¿qué le sugiere?

Bueno, el símbolo de la luz para nuestra fe es muy importante porque simboliza a Jesucristo Resucitado, la luz que nos guía y acompaña, es signo del Bautismo que nos hace Hijos de Dios. ¿Y qué me sugiere para Utrillas? Pues que tenemos que transmitir esta Luz que es Jesús a las gentes aún en medio de la oscuridad, de la indiferencia religiosa. En una palabra: dar buen ejemplo y testimonio de Jesús al pueblo.

¿Cómo es su día a día con el trabajo pastoral de los pueblos? ¿Se llega a todo?

Es oración, celebrar la Eucaristía, acompañar a la comunidad, escuchar, atender las necesidades, visitar al enfermo... Lo importante para llegar a todo o casi todo, la organización.

Usted, ya lleva varios años acogiendo a Familia Misionera en los pueblos a los que ha sido destinado: ¿qué le aportan estas familias para que sigan yendo a apoyarle?

Bueno, pues me aportan alegría, experiencia de encuentro con Cristo, esfuerzo y sacrificio de desplazarse toda la familia haciendo muchos kilómetros, la comunión entre padres e hijos y la fe en Dios.

¿Y a los feligreses, qué les aporta más allá del apoyo litúrgico de la Semana Santa?

Yo pienso que mucha novedad, porque seguramente nunca habrán visto, en estos días de Semana Santa, tantas familias de fuera ayudando y colaborando. Y también con agradecimiento por ese apoyo.

¿Se sienten los frutos de la misión a lo largo del año?

Pienso que es difícil hablar de frutos porque sólo están cuatro días al año, pero el Espíritu siempre sopla y siempre hay frutos.

¿Cómo conoció familia misionera?

En torno al año 2005 y hasta ahora. Y por ello le doy gracias a Dios por todo lo que me ayudan y aportan.

Que Dios os siga bendiciendo.