20 de marzo de 2014

El párroco de Santa Florentina, en Cartagena: "La parroquia se rejuvenece con la presencia de Juventud Misionera"

Antonio José Palazón es el párroco de Santa Florentina, en Cartagena (Murcia), uno de los sacerdotes que abren las puertas de su parroquia a Juventud Misionera en esta Semana Santa. Le hemos preguntado qué es lo que aportan los jóvenes cuando están allí y nos ha respondido que su juventud y su fe "unas veces más elevada, otras más vacilante, pero siempre importante". 

Lee a continuación la entrevista completa pincha aquí



Son ya varios años los que llevan los jóvenes de Juventud Misionera yendo a su parroquia, ¿cuáles son las tareas que usted les encarga?
Cada año son diversas, porque también han ido variando con las distintas realidades de las dos parroquias que he tenido en el tiempo que están viniendo por aquí. Este año, nos centraremos más en las visitas a las casas de la gente de la parroquia invitándoles a participar en las celebraciones de la Semana Santa. La mañana del Viernes Santo estará dedicada a identificarse también con la realidad del sufrimiento y del dolor del hombre, por eso se visitarán a los enfermos en el hospital y a los ancianos en las residencias de los Hermanos Maristas y de las Hermanitas de los pobres. Por la tarde de ese mismo día del Viernes Santo, también se acercarán a la casa de los enfermos de la parroquia con el fin de hacerlos partícipes de la misma liturgia que celebramos en la parroquia. Todo esto, además de participar activamente en las celebraciones litúrgicas de la parroquia. El centro de todo será la noche-madrugada del Jueves al Viernes Santo, que se desarrollará "La Luz en la noche" en la parroquia del Carmen, situada en pleno centro histórico de Cartagena, donde hay una verdadera corriente de personas por la calle.
¿Qué aportan de novedoso estos chicos a la vida parroquial?
Pues, fundamentalmente, aportan lo específico de su edad, es decir, su juventud. Pero no solo esto, que podría ser considerado como meramente humanista. Sino uniendo esto a su fe, unas veces más elevada otras más vacilante, pero siempre importante. El hecho, simplemente de que en plena Semana Santa, aprovechando sus días de vacaciones, quieran dedicarlos a hacer algo por Cristo, ya se convierte en un auténtico testimonio para las familias que las reciben en las casas para comer, los feligreses que vienen a los oficios, etc.
¿Qué es lo que encuentran estos chicos al hacer misiones? ¿Es verdad aquello de que ‘se recibe más de lo que se da’?
Yo creo que lo que encuentran fundamentalmente es a Cristo. Ir de misiones, no es ir a la comodidad, sino más bien hacer el ejercicio de salir de ella, para darte en la tarea que en cada momento te muestre el Señor. Una tarea que no suele dejarte cómodamente en el sillón. Así cuando uno comienza a salir de sí mismo, puede empezar a descubrir un poco el rostro de otro que está siempre a tu lado y que muchas veces puede pasar desapercibido, pero que no deja de mirarte, no deja de amarte. Por tanto, ir de misiones es colocarte un poco en el punto de mira de Jesús para descubrir su amor. Si uno hace este ejercicio de salida, por supuesto que se recibe más de lo que se da, porque al descubrir su amor quieres responder amando, pero al mismo tiempo te das cuenta, que siempre eres amado tú más de lo que puedes llegar a amar, por tanto, el primer gran beneficiado es el que quiere ponerse en marcha, siempre y cuando vaya con una limpieza de corazón; recordemos que los limpios de corazón serán los que verán a Dios. No se puede comenzar mejor unas misiones que limpiando el corazón, es decir, acercándome al sacramento de la penitencia a buscar la reconciliación con Dios, porque entonces podré ser instrumento de reconciliación.
¿Cómo les ven sus parroquianos?
Con gran ilusión. Hay que tener en cuenta que aquí son muy mayores, con lo cual parece fácil caer en el desánimo de dónde están los jóvenes. Cuando de pronto ven que su parroquia se rejuvenece con la presencia de jóvenes que quieren buscar al Señor, se contagia inmediatamente, fortaleciendo el ánimo.
La vida parroquial el resto del año, ¿es más animada, se sienten algunos frutos, quizá en la juventud?
Yo tengo la experiencia de estar también con jóvenes a través del Camino Neocatecumenal, del cual participaron varios jóvenes en algunas actividades y verdaderamente les ha supuesto un signo claro de la presencia del Señor. De hecho alguno me preguntó si este año podían participar también. En cuanto a la parroquia, sí se nota. Recuerdo que como fruto de las primeras misiones que hicimos en la parroquia anterior, surgió el celebrar los primeros viernes de mes como reparación al Sagrado Corazón de Jesús, con un tiempo más prolongado de adoración al Santísimo que de costumbre.
¿Recuerda alguna anécdota de la presencia de los jóvenes?
Hay muchas, pero solamente haré mención de una. Hace como tres años, estando todavía en Águilas, y presidiendo una procesión de Semana Santa, se me acerca una mujer para darme las gracias por haberle mandado a las chicas a visitar a su hijo enfermo, que había supuesto un consuelo para él y su familia. Aquella actitud de aquella madre, ya justificaba la presencia de todos los días.
¿Qué les diría a los jóvenes para que se animaran a ir de misiones?
Fundamentalmente una cosa, que el Señor les está llamando, les está esperando, cuenta con ellos. ¿Cómo puedo decir que soy cristiano si no quiero responder a lo que el Señor me pide? Y ahora el Señor está pidiendo su colaboración, es más les muestra que los necesita. Es tan sencillo como hacer un esfuerzo de negación de uno mismo, que es el primer peldaño para comenzar a ser cristiano, pero que si tienes la garantía de que las gracias que puedes llegar a recibir son mayores que tu pequeño sacrificio, no tendrás miedo en enrolarte en lo que ahora el Señor te pide. Ánimo y ¡no dejéis sólo al Señor! ¡Cuenta con vuestra generosidad!


Si quieres más información sobre las misiones de Semana Santa puedes hacer  click aquí para Juventud Misionera, y aquí para Familia Misionera.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por darnos tu opinión