Páginas

13 de junio de 2013

Los de Roma.-Sol, arena y mar

Los de Roma, a pesar de disfrutar en todo momento de la voluntad de Dios, ya no se aguantan las ganas de que llegue el verano, tanto que se han puesto a recordar algunas de las mejores vacaciones de su vida, muchas de ellas antes de ser seminaristas. Hablan de la primera vez que se enamoraron, de sus primeras misiones y también de sus primeras decepciones deportivas. (Continuar leyendo)

Pregunta 23
¿Cuál es el verano que más recuerda?




JULIO MUÑOZ
Mi último verano antes de entrar al seminario. Puerto de Santa María (Cádiz), agosto de 2001. Todo el día encima del  vespino, playa, amigos y amigas, copas, deporte, días cortos, noches largas… Pero, eso sí, los domingos iba a misa. Fue el verano más divertido de mi vida. Digo divertido, porque el momento más feliz fue la primera noche que pasé en el seminario. Tal vez esto lo diga todo.


ALBERTO PUÉRTOLAS

Varios meses antes del verano del 92, me comprometí a asistir a un mes de misiones en México. Llegó ese verano, y me di cuenta de que las fechas coincidían con los Juegos Olímpicos en Barcelona, mi ciudad. Pero yo ya me había comprometido.
Me reía de mí mismo repitiéndome: “Las próximas que sean en mi ciudad, no me las pierdo”. Fui la burla de todos mis amigos. Desde entonces, uso agenda.
Por supuesto, no me arrepiento.

  

PABLO LORENZO
Todos los veranos de mi vida han sido increíbles, pero en especial el verano del año 2002. Fui a la JMJ de Toronto con mis padres y un grupo del Camino Neocatecumenal. Era la primera vez que cogía un avión y como sólo tenía 12 años, todo me pareció alucinante: ver a Juan Pablo II, estar en Estados Unidos, etc.

JOSÉ DAVID VÁZQUEZ
Cuando me partí la nariz montando en bicicleta…(por poner un ejemplo)

ANDREU FIGUERAS






JUAN CARLOS VÁZQUEZ









PABLO ROGER









PEDRO DE LA HERRÁN

Creo que cuando tenía 14 años y me enamoré de verdad por primera vez. No digo que fuera mi mejor verano, porque de hecho al final no salió nada de esa relación preciosa que tuve con aquella chica. Pero sí es el que más recuerdo. Para darle un sentido algo profundo, añado que es increíble lo intensos que son los años de adolescencia y lo muchísimo que influyen en el resto de la vida.





FRANCISCO MATEOS



MIGUEL SUBIRACHS



Todos los veranos son especiales… Todos tienen su sorpresa y enseñanza. Y lo mejor, la compañía….



No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por darnos tu opinión