Inelén Ortín, Valencia: Este año celebramos la solemnidad de Cristo Rey la víspera, el sábado, en el nuevo y recién estrenado Colegio Cumbres en Moncada. Los jóvenes de la sección se encargaron de organizar un día lleno de actividades para toda la familia; torneo de pádel por la mañana, cinefórum, café vocacional y la misa para terminar. En el café vocacional pudimos escuchar los testimonios, entre otros, de los Hermanitos del Cordero y vía Skype hablamos con Alfredo, un joven de nuestra sección que vive su primer año como consagrado en México.
Como no podía ser de otra forma, comimos una paella monumental. Mi hijo de 2 años acabó rebozado en arroz y helado de chocolate, yo horrorizada y él encantado de la vida. Los niños disfrutaron muchísimo en las increíbles instalaciones del colegio. Fue como siempre, un día de familia, nuestra familia del Regnum Christi, lleno de alegría y agradecimiento por todo el bien recibido. (En la foto vemos al cocinero del colegio Cumbres Valencia, preparando la paella desde el lunes)
Amada Blanco, Madrid: Todas las Festividades de Cristo Rey tienen un sello especial, algo que provoca que me vaya a casa feliz y con el sentimiento de haber vivido una jornada muy especial en familia. Me gusta encontrarme casi desde el momento en que me bajo el coche con caras conocidas, o desconocidas pero con las que sé que voy a compartir el mismo espíritu.
Me encanta cada año ver y sentir a las consagradas
llegar y prepararse para participar en el Coro. Me hacen sentir como que nada
es más importante para ellas en ese momento como encontrarse conmigo y con los
míos.
Empieza la Misa y ¡ese desfile de Legionarios!
En ese momento siempre se me escapa una lagrimilla de emoción y de gratitud, de
profundo respeto, admiración y afecto. Toda la Eucaristía
desemboca en un momento de profundo agradecimiento al Señor por haberme
conducido hasta ese instante, por todas las personas que me han ayudado a
llegar, por todos los obstáculos que me han servido para madurar, por tantas
cosas….
Este año ha habido un “además” para mi. Estamos en
pleno “momento Lineamientos”, con lo que eso ha supuesto de reflexión, de
intensidad, de preguntas, y en medio de toda esa actividad, este Cristo Rey nos
trae al P. Sylvester, un Legionario joven, ¡alemán!, para mí totalmente
desconocido, que quiere pasar la tarde con nosotros y contarnos. Tenía una
ligera idea, precisamente por el momento en el que estamos, de sobre qué nos iba a
hablar, pero lo que ni sospechaba es el cómo nos iba a hablar ni el contenido. Le he dado gracias al
Señor por haberle escogido a él en estos momentos y circunstancias del Regnum Christi. Me fui a casa con la certeza de que estoy donde tengo que
estar, de que estamos en manos de quién tenemos que estar y de que Cristo ha
querido, porque nos quiere, acrisolarnos a fuego, para llegar a ser como Él
quiere que seamos. Cristo Rey Nuestro, ¡Venga tu Reino!
Fran Torrebella, Palma de Mallorca: Cristo Rey fue una FIESTA para todos los miembros del Regnum Christi en todos los aspectos, celebramos todos juntos la misa en una parroquia en pleno centro de Palma en donde nos reunimos todos los miembros de RC, Club Faro, Club Alpes.. Después, todos nos fuimos al Club Faro y el centro RC donde se organizó una ``merendola´´y un mercadillo solidario respectivamente. Para mí particularmente fue una fiesta entre todos, ambiente de amistad, de cordialidad, de familia con algo especial y es que toda esa fiesta fue por y para Cristo. Ángel Solera nos comparte también: Lo que significó esta celebración para mi fue una llamada de atención sobre el hecho de que el verdadero modelo a seguir es Cristo, y que es muy importante centrarse en Él y tenerle presente en todas las cosas.
Lo + RC Sevilla, también nos comparte cómo se vivió aquí la fiesta: Fue una jornada vivida muy en familia, muy conscientes del momento único que atravesamos, quisimos aprovechar este día tan especial para el Regnum Christi para organizar grupos de reflexión sobre los lineamientos, en esta ocasión una reflexión, como se nos pedía, transversal, dado que todos los equipos estaban compuestos por laicos, sacerdotes y consagradas. A continuación dio comienzo la Santa Misa durante la cual y con motivo del año de la fe entregamos velas bendecidas, una a cada familia; realizamos también la renovación de las promesas bautismales.
Tras la Misa un grupo de 14 jóvenes quisieron incorporarse al Movimiento Regnum Christi, como un paso mas en su madurez espiritual, escogiendo este camino, uno como tantos otros en la iglesia, para vivir con plenitud su cristianismo.(En la foto vemos parte de la numerosa Sección de jóvenes en su viaje a Santiago).
María Moya, colaboradora en Barcelona: Personalmente la misa de Cristo Rey me ayudó en cuanto fue una celebración en familia, todas las realidades del movimiento estuvieron presentes y participaron en la misa: Legionarios y sacerdotes diocesanos, consagradas, laicos, niños del ECyD y de NET, alumnos y familias de los colegios. Después tuvimos un refrigerio en el Highlands que también ayudó mucho para esto :)
El pasado sábado pude vivir, una vez más, que el Movimiento vibra con un espíritu que va más allá las circunstancias y las dificultades que puedan presentarse, con la mirada puesta en Dios y en el prójimo, y con el espíritu de caridad y de familia que siempre nos ha caracterizado.
Salamanca, la Misa de Cristo Rey tuvo lugar el sábado en la Iglesia de la Purísima de Salamanca. Antes de iniciar la Misa un hermano novicio y una consagrada del Regnum Christi compartieron su testimonio de encuentro con Cristo y de apostolado en el Movimiento. La Misa la presidió Don Florentino Gutiérrez Sánchez, Vicario General de la Diócesis de Salamanca y concelebraron 9 sacerdotes legionarios y un sacerdote diocesano. Participaron los miembros y amigos del Movimiento, así como las comunidades de novicios y humanistas. El Hermano Javier Castellanos comparte: Junto con toda la Iglesia, concluimos el año litúrgico para celebrar a Cristo Rey. Para nosotros este día es una gran oportunidad para reunirnos como familia Regnum Christi, en torno a Aquel que nos mantiene unidos en la fe y en la caridad. Los testimonios que escuché ese día me ayudaron a valorar más la gran familia que es el Movimiento y me estimuló a seguir entregando mi vida a Cristo. La Eucaristía nos une más íntimamente con Dios, con la Iglesia y como Reino de Cristo. Y al recibirle en la comunión, renovamos de manera particular y común, nuestra consagración a Cristo y nuestro deseo de que Él reine cada día más en muestra propia vida y en nuestra sociedad.
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