Juventud Misionera clausura un año
lleno de actividades y se prepara para las misiones de verano de la mejor
manera, yendo de copas por Madrid. Durante todo el curso, los jóvenes
misioneros llenaron los calendarios con rosarios, adoraciones, fiestas y
misiones. Es la primera vez que desde Juventud Misionera se “adopta” una
parroquia durante todo el curso, la parroquia del Carmen. Para concluir el año
con broche de oro, todos los jóvenes se reunieron el viernes pasado. Fueron
primero a la Iglesia del Carmen a dar gracias a Dios por el curso, por el
apostolado y por las personas nuevas que han conocido con las que se han acercado
más a Cristo.(Continuar leyendo)
Después del Carmen se fueron todos a cenar y a tomar algo a los Cien montaditos. “Fue una conversación súper amena y profunda, estudios, misiones, testimonios, planes a futuro”, comenta Víctor, misionero. Este curso no solo las actividades de los calendarios se multiplicaron, también el número de asistentes. Son ya muchas experiencias e ideales los que los unen, son una verdadera piña de amigos. Algunos de ellos se van de misiones a Guatemala, seguramente que entre todos se echarán de menos este verano, en el cual la misión continúa.
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