13 de junio de 2013

Entrevista con Belén, Emilio, Manuel y Daniel

Belén Martín, Emilio Pou, Manuel García de Polavieja y Daniel Sada han vuelto de Roma con respuestas a algunas de nuestras preguntas y con la convicción clara de comunicar su experiencia, que compartirán próximamente en cada una de las localidades. En esta entrevista nos hablan de la sintonía entre las inquietudes de los miembros de Regnum Christi de todo el mundo, cómo se prepararon a nivel personal, cuáles son sus certezas e incertidumbres sobre el proceso y cómo sienten la responsabilidad de cada miembro del 1º y 2º grado para llevar a buen término esta etapa. (Continuar leyendo)


1.     Las reflexiones y preocupaciones que se escuchan en el RC de España, ¿van en sintonía con las del resto del mundo? 

Belén: Ha sido sorprendente la sintonía que había en general en todos los grupos. Aunque hemos reflexionado sobre  algunos artículos de los Estatutos y del manual, hemos descubierto una necesidad de mayor reflexión en los grandes temas, como la gradualidad, la pertenencia y la organización de las secciones.
Emilio: Llamaba mucho la atención la homogeneidad de las reflexiones de los diferentes países en los temas fundamentales, como la definición de nuestro carisma, nuestra espiritualidad, etc… Las pequeñas dificultades surgieron cuando se trabajó en detalle el borrador del estatuto, a menudo por diferentes matices en el sentido del vocabulario usado según los países. Como por ejemplo el término incorporación o membresía.
Manuel: Hemos encontrado que en lo fundamental tenemos el mismo núcleo. Ha habido aspectos más concretos donde eso no ha ocurrido. Por ejemplo, cuando hablábamos de las secciones y su organización había divergencias. Al final nos dimos cuenta de que la realidad en México es totalmente diferente a la de España. Sobre todo por los tamaños y por la experiencia, y vimos que hay aspectos que tienen que depender de las circunstancias. Pero ha sido realmente muy bonito poder comprobar que aquello que nos mueve en nuestra vida es básicamente lo mismo.

Daniel: Creo que todos comprobamos la comunión sorprendente que hay sobre la percepción de nuestro carisma entre personas de tantos países y con experiencias tan diferentes del RC. Lógicamente las preocupaciones prácticas de Alemania o Filipinas, donde a veces los equipos de Reino están compuestos por personas que viven en ciudades distintas y se suelen reunir para el Encuentro por Skype, son algo diferentes de las de otras localidades con equipos, grupos y secciones bien constituidos.

2.     Personalmente, te preparaste de alguna forma particular para este viaje?

Belén: Creía muy importante leer los documentos que nos convocaban para saber muy bien cuál era el objetivo de estas sesiones. Me llevé las cartas del Padre Sylvester y el extracto de Estatutos que nos mandaron como documento de trabajo a la capilla, ahí pienso mejor...  También repasé las comunicaciones que ha tenido el Cardenal De Paolis con nosotros. Esto fue muy útil, la verdad. Y también rezaba por los otros seglares con que iba a encontrarme. Una de las cosas que hicimos en Madrid para prepararnos, fue el encuentro con todas las secciones, también con los jóvenes, sus  directores y algún consagrado. Además, por mail nos ofrecimos los cuatro representantes a todas las secciones de España para que pudieran aportar lo que creyeran importante para su reflexión en Roma ¡¡y hubo una buena respuesta!!
Emilio: Leí el material que se nos había enviado desde Roma. En particular, me ayudó mucho escuchar la conferencia del P. Sylvester  del 9 de abril, disponible en la web del RC. Además, me reuní con miembros del RC de Mallorca y se organizó una reunión con todas las secciones de Valencia. También recibí algunos mails con aportaciones, que me ayudaron a completar la síntesis del punto de vista del RC de España.
Manuel: Pedí que rezaran por los frutos del mismo y dediqué tiempo a leer y meditar (también llevar al a oración) el material previo que nos habían hecho llegar. También compartí impresiones con muchas personas y otras nos enviaron sus propuestas.
Daniel: La principal preparación fue recoger y ordenar, en colaboración con los otros representantes de España, las aportaciones que nos llegaron de equipos y personas de las diversas localidades. También releer material. Quizá lo que más me ayudó fue la conferencia del P. Sylvester que está colgada en la web del RC y que impartió en Roma pocas semanas antes de nuestra reunión, explicando todo el proceso. Recomiendo a todos que la escuchen.

3.     ¿Crees que se corra algún peligro en este proceso? ¿Cómo evitarlo?


Belén: Creo que caminar de la mano del Papa, de su Delegado, y estar muy abiertos al Espíritu Santo es la forma de superar cualquier dificultad. Pasa por la confianza en Dios y en la Iglesia y me atrevería a decir ... también la confianza en lo que somos.
Emilio:  La alegría más grande que tuve en la reunión es la constatación de que es una obra de Dios, querida por la Iglesia y de que vamos caminando por la ruta segura, de la mano del Cardenal De Paolis. Fue sumamente edificante la convivencia con “nuestros hermanos mayores”, que van delante nuestro en este proceso: los sacerdotes, las consagradas y los consagrados.
No creo que el proceso corra peligro si todos hacemos lo que se espera de nosotros.
Manuel: El proceso en sí no creo que tenga ningún peligro. Estamos guiados por la Iglesia y eso da mucha garantía. Yo creo que el peligro puede estar en las personas, que las actitudes que tengamos no sean las adecuadas. Si se vive el proceso con caridad, apertura, claridad y oración no veo que algo pueda ir mal.
Daniel: Creo que el Espíritu Santo nos lleva a través del acompañamiento de la Iglesia. Lo ha demostrado. El único peligro que veo es la desconfianza en el proceso y que nos fijemos demasiado en la parte humana y organizativa que conlleva, en vez de mirar a la historia de fondo que Dios quiere seguir escribiendo sobre el RC.

4.     ¿Qué se espera del resto miembros de 1º y 2º en estos momentos?

Belén: Lo dijo el Padre Sylvester en su conferencia en la que explica detalladamente el proceso en el que nos encontramos: las actitudes para vivir este momento son fidelidad y valentía.
Emilio: Creo que después de los momentos de dolor, tenemos la oportunidad de participar activamente en el proceso que nos pide la Iglesia, haciendo más auténtica la vocación que hemos recibido. Después del dolor de la enfermedad tenemos que ir avanzando hacia el gozo de la purificación, con humildad y sencillez. Creo que la Iglesia quiere que sigamos adelante.
Manuel: Yo espero que todos puedan participar de alguna manera en este proceso en la forma que se cierre con el Cardenal De Paolis. Pero también rezando para que el Espíritu Santo lo lleve a buen puerto.
Como conclusión me atrevo a decir que he vivido en estos días en Roma caridad, unión, familia, ilusión, alegría y esperanza. Ha sido una experiencia maravillosa que todos podemos tratar de llevar a nuestra vida diaria y a nuestros equipos. Doy gracias a Dios por haberme permitido participar en este encuentro.
Daniel: Renovación de la ilusión y entender que todo lo que nos ha pasado no es para paralizarnos, acusando el golpe recibido, sino para dar un paso de madurez en nuestra historia del RC y tomarnos cada uno más a fondo el deseo de santidad, de amar más y mejor, de ponernos con más madurez y profundidad al servicio de la Iglesia.



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